Dime la verdad, estoy gorda?. No sabría decir cuantas veces he preguntado eso ni tampoco cuántas lo he escuchado. Gordas que preguntan obviedades, flacas constantemente en dietas, víctimas de un mal peluquero que preguntan si se ven bien, etc. etc. etc.
Creo que tenemos graves problemas de percepción o simplemente queremos que nos mientan. Algo nos pasa porque…seamos realistas, cualquiera que se ve al espejo se da cuenta que se le sale el rollo.
Dejemos de lado los problemas de gusto o las malas modas, que esos aspectos son casi imposibles de notar o hacer entender a las posibles víctimas. Siendo bien sincera, no sé qué es lo que esperamos cuando preguntamos cosas como estas.
Hay que ser realistas, estamos viejas y hace rato que nos depilamos ¿cómo es posible que no nos demos cuenta de algunas realidades?. Lo lógico sería que tratáramos de hacer algo para que esas desagradables revelaciones se reviertan y no hacerlas más patentes buscando la aprobación del entorno.
No pongamos a quienes nos quieren en aprietos y tampoco nos conformemos cuando alguien (que no quiere pelear) nos dice que estamos esplendidas. La realidad está en nuestro espejo, no tratemos de evadirla.
Si nos cortamos mal el pelo, si se nos pasó la mano con los asados o si simplemente hacemos que dudamos para que alguien más no diga que somos lindas… asumamos… la única persona que realmente importa somos nosotras.
Deben ser nuestros ojos los que queden conformes y si no lo están… bueno… se caen los aviones, con mayor razón nosotras que somos tan q@tiks.
Porque ser cuática no es malo
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment